lunes, 13 de octubre de 2014

INCOMPETENCIAS VARIAS

Hace unos días escuchaba en un programa de tertulia de actualidad de la televisión, de un canal privado por supuesto, una frase lapidaria para nuestra realidad y sin embargo perfectamente descriptiva con lo que ocurre en nuestro país a todos los niveles, ésta era la siguiente: "normalmente en política quienes ascienden son personas dóciles, manejables, afines y pelotas, personas en su mayoría carentes de preparación o aptitudes naturales para desempeñar el puesto, pero llegan por amiguismo cuando las personas competentes para el cargo están desempeñando cargos intermedios sin importancia sin posibilidad alguna de llegar, y nos encontramos con este gente incompetente dirigiendo el país". La verdad es que no puedo estar más de acuerdo, es triste pero real, sólo hay que leer cualquier periódico cualquier día para darse cuenta de que estamos siendo gobernados por absolutos incompetentes, a quienes decirles que el puesto les viene grande es ser amable. Y hago esta reflexión después de ver como se ha llevado la crisis del ébola por parte de este gobierno (?), primero trayendo a los religiosos a España, desoyendo los consejos de las autoridades sanitarias internacionales, y llevándolos al Carlos III, un hospital prácticamente desmantelado por los recortes y los intentos de privatizaciones, que ha pasado a ser un anexo de La Paz, sobra decir que los protocolos han sido desatendidos en su mayoría, no por los sanitarios que han reclamado más formación y medios, sino por las autoridades. Que la ministra Mato debe dimitir es algo absolutamente obvio para cualquier ser pensante que no pertenezca al PP, una persona cuya formación y dedicación profesional no puede estar más alejada del sector sanitario, lo que la lleva a que en las entrevistas y comparecencias públicas (prácticamente inexistentes desde que ocupa el cargo) se la ve absolutamente perdida y debe delegar las respuestas a otros cargos que al menos sepan, o eso parece, de lo que están hablando. Significativo es que desde que se produzco el contagio de la técnico sanitaria Teresa sólo ha comparecido 3 veces hablando un total de 17 minutos, cronometrada en varios programas de televisión, lo que es absolutamente indignante y deja bien claro que no debería haber ocupado ese puesto nunca. Lo del consejero de sanidad de Madrid ya es el sumun de la desfachatez, otro ejemplo claro de la frase con la que comencé esta reflexión, ha llegado a culpabilizar a Teresa de su contagio, la ha llamado mentirosa y descuidada, prácticamente imputándola un delito, ya que tener contacto con otras personas sabiendo que se podía estar infectado por un virus mortal es constitutivo de delito, tipificado por la ley, ha dicho prácticamente que los sanitarios son personas cortas porque no es necesario un master para ponerse un traje, creo que aun no sabe que se trata de un conjunto de varias prendas superpuestas que se debe poner en compañía y bajo supervisión de varias personas y que en África tardan casi un mes en enseñar como ponerlo y quitarlo bien para evitar contagio, y que en nuestro país sólo tuvieron una charla de 15 minutos, rematando todo esto con el famoso "yo dimitiré cuando lo crea oportuno porque tengo la vida solucionada". Me encantaría saber que mérito personal tiene este ser para ocupar este puesto, y no creo que la falta absoluta de empatía sea uno de ellos. Lamentablemente no son caos aislados, Ana Botella, Wert, Montoro, Bañez,... la lista es inmensa y abarca practicante a todo el gobierno y muy especialmente a Rajoy, puesto a dedo en su puesto por Aznar, ¿quizás por ser dócil y manejable?...

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