CIUDADES-PERSONAJES

En estos días hay una exposición absolutamente recomendable en el CCCB de Barcelona sobre el grandísimo director italiano Pier Paolo Pasolini, dividida en varias secciones repasa su extensa carrera no sólo como director de cine, sino también como escritor, director de teatro y también sobre su agitada vida personal y su trágico final. Se hace especial hincapié en su relación cinematográfica con Roma, que fue no sólo escenario de alguna de sus más aclamadas cintas sino también casi un personaje más al que dio sentimiento y caracterizó; tuvo con ella relación de amor-odio, desencuentros, decepciones, adoraciones, fases de atracción y otras de rechazo absoluto, relación al fin, que todo artista tiene con su musa. Pero no es el de Pasolini caso único, hay multitud de directores, de reconocimiento mundial que han hecho de su ciudad (de nacimiento o adopción), personajes en sus filmes que interactúan con los de carne y hueso; constituyéndoles su principal campo de observación, su espacio permanente de estudio y reflexión, analizando de esta manera la evolución de esas sociedades a lo largo de décadas. Entre estos cabe destacar al norteamericano Woody Allen con Nueva York, ciudad idolatrada desde su neurótica perspectiva, donde sus personajes se movían siempre entre brillantes diálogos entre las grandes avenidas de la gran manzana, siempre sintió verdadero amor por ella y así lo dejó plasmada en aquella frase de “Manhatan” : “Él era tan duro y romántico como la ciudad que amaba. Tras sus gafas de montura negra se agazapaba el vibrante poder sexual de un jaguar. Nueva York era su ciudad y siempre lo sería.” Además el genial de Allen nos dio quizás la que es una de las imágenes más recordadas y bucólicas de la gran manzana: en blanco y negro desde Brooklyn mientras suena una melodía interpretada por un clarinete. Otro de los grandes genios que tuvo su musa de piedra fue Federico Fellini y la eterna Roma, incluso una mis películas favoritas del italiano lleva por título el nombre de la ciudad. En “Roma” se hace un tributo de admiración a la eterna desde los recuerdos de un joven llegado a la ciudad, en clara alusión al propio director, y además la ciudad es encarnada en el poster de la película por otra de las obsesiones del italiano: una mujer de vida alegre de grandes pechos y entrada en carnes. En otras películas del genial director Roma se muestra como una realidad uniforme, interminable y contradictoria, pero mágica y fascinante al mismo tiempo, cabe recordar los bajos fondos de “Las noches de Cabiria”, y el glamour de una época irrepetible de “La dolce Vita”. No puedo dejar de hablar de mi idolatrado Almodóvar que ha hecho de Madrid EL personaje de casi todas sus películas, siempre con una banda sonora impresionante, nos retrata la capital desde su perspectiva muchas veces alternativa, kitch y underground, pero siempre sorprendente y única. Quién no recuerda a una Carmen Maura aturdida caminando por una avenida desierta mientras amanece sobre la silueta del pirulí, a una Marisa Paredes y Victoria Abril cara a cara cerca de la Plaza Mayor o a una Penélope Cruz cual Sofía Loren castiza contoneándose por el sur de Madrid., Ciudades y personajes, personajes que interactúan con ciudades, ciudades que sobresalen sobre personajes, ciudades que son personajes.